Román Podolsky es un destacado dramaturgo y director teatral, junto al experimentado cineasta Mariano Galperin decidieron llevar adelante Todo lo que veo es mío, un filme que aborda los días porteños del gran artista francés Marcel Duchamp.
Felix De Cunto pudo dialogar con los realizadores a propósito del estreno comercial del filme que llegará mañana a las salas argentinas.
¿De dónde nace la idea de realizar Todo lo que veo es mío?
Román Podolsky: Mariano Galperin me convocó para escribir y dirigir juntos una película. Habíamos sido compañeros de la escuela primaria y casi que no nos veíamos desde entonces. Él tenía la idea de trabajar sobre la estadía de Duchamp en Buenos Aires y a mí me pareció una idea muy potente, un gran desafío.
Mariano Galperin: Marcel Duchamp es una de las personas más interesantes de la historia del arte así que cuando descubrimos que había estado un año en Argentina nos pareció increíble y empezamos a profundizar en el tema. Haberlo tenido tan cerca y en una época tan lejana es un tema interesantísimo.
¿Cuáles fueron los obstáculos principales a la hora de encarar una película de época? ¿Cuál creen que fue su mejor acierto para maximizar los recursos?
R.P.: Se trataba de extremar los recursos que no eran holgados. Nunca pensamos en una superproducción. Pensamos en una película intimista, que intentara mostrar el modo en que Duchamp veía el mundo. Queríamos hacer imaginar eso. Acotamos los planos y elegimos con inteligencia las contadas locaciones en las que se filmó la película.
M.G.: El hecho de que el personaje sea una persona muy austera sumado a que todavía no existía el consumismo rabioso nos facilitó mucho a la hora de pensar el vestuario. Es una película chica y la verdad es que estamos orgullosos de que transcurra en 1918
¿Con qué elementos contaban para reconstruir los meses de Duchamp en el país?
R.P.: Contábamos con la correspondencia que él mantuvo con amigos y familiares durante los diez meses que pasó en Buenos Aires. También con los capítulos sobre esa estadía que varias biografías consultadas le dedican. A partir de esos datos históricos nos dedicamos a inventar.
M.G.: También pensamos en muchas cosas que estaban ocurriendo en la época, como la Semana Trágica. Una cosa que nos gustó mucho y que nos ayudó a imaginar situaciones fue que encontramos leyendas urbanas -más en Francia que acá- que decían por ejemplo que Duchamp había estado cinco días con unos tangueros de reviente total.
Duchamp era un observador nato y era desapegado respecto de las relaciones y los lugares.
¿En base a qué prepararon el papel interpretado por Michel Noher?
R.P.: Hablamos mucho con Michel sobre la inteligencia de Duchamp. Sobre su fino humor y su mirada irónica y distante de la vida. Duchamp era un observador nato. Se involucraba poco en las situaciones sociales. Y era desapegado respecto de las relaciones y los lugares. Michel entendió perfectamente lo que buscábamos y eso se ve en la película.
Siendo una realización bicéfala, en donde Román viene de la dramaturgia y Mariano del cine, ¿cómo congeniaron a la hora de pensar el guion y posteriormente construir la puesta en escena?
R.P.: Trabajamos juntos todo el tiempo, potenciándonos a partir de las diferencias. Mariano tiene una gran experiencia como realizador y fotógrafo. Yo traigo la mía en relación a estructura dramática y manejo de actores. Fue muy placentero reencontrarnos después de tanto tiempo y comprobar que podíamos hacer algo juntos.
M.G.: Juntamos las cabezas y tratamos de que todo salga de ahí. Hoy sería muy difícil pensar que hizo él o que hice yo. Pudimos por suerte utilizar las dos cabezas como una. No como dos que sacaban chispas sino como una sola que sacaba rayos.
¿Cómo sigue el curso de la película después de su estreno en Argentina?
R.P.: Estamos enviando la película a diversos festivales. Y ahora se viene el estreno en Buenos Aires, que nos tiene muy entusiasmados.
M.G.: La película está recién salida, pensá que la terminamos una semana antes de ir a Mar del Plata asique. Ojalá que podamos ir a muchos festivales.
¿En Francia pudieron verla? ¿Recibieron algún tipo de comentario?
R.P.: Todavía no tuvimos oportunidad de recibir comentarios desde allí. Estamos expectantes al respecto.
M.G.: En Francia no, pero sí la vieron unos franceses en Mar del Plata. Fue muy linda la revisión porque la gente quedaba contenta. Decían “uy qué ganas de que la vean en mi país”. Otra observación que nos hicieron fue que la película era entretenida más allá de si uno sabía o no quien era Duchamp. No es informativa para nada y la película se sostiene igual. No tiene nada de biopic, es lo que nosotros pudimos imaginar.
Por Felix De Cunto
@felix_decunto