Anatomía de una Caída / Anatomie d’une chute (Francia – 2023)
Estreno en cines
Dirección: Justine Triet / Guion: Justine Triet, Arthur Harari / Producción: Marie-Ange Luciani, David Thion / Fotografía: Simon Beaufils / Montaje: Laurent Sénéchal / Intérpretes: Sandra Hüller, Swann Arlaud, Milo Machado Graner, Antoine Reinartz, Samuel Theis, Jehnny Beth, Saadia Bentaïeb, Camille Rutherford, Anne Rotger / Duración: 151 minutos.
Anatomía de una caída fue una de las grandes sorpresas de la temporada festivalera de 2023. El cuarto largometraje de Justine Triet (La bataille de Solférino -competencia en Mar del Plata 2013-, Victoria y el sexo) cuenta la historia de una trágica muerte con su investigación y posterior juicio.
Lo más interesante del filme es la notable destreza que demuestra Triet para narrar con sutileza. Ya desde el prólogo asistimos a los instantes previos y posteriores al incidente. Al inicio vemos a una escritora, Sandra Voyter (Sandra Hüller), brindando una entrevista de una manera muy relajada y sugestiva hasta que una música altisonante la interrumpe casi al mismo tiempo que el hijo de la escritora sale a caminar por la nieve con su perro. Entre ese momento y el del regreso del niño se producirá la caída aludida en el título.
Lo que sigue es un trabajo de reconstrucción forense del hecho y de la relación entre el hombre fallecido y su esposa Sandra. El relato nos dará elementos para abrazar cualquiera de las dos teorías sobre la caída y muerte de Samuel, otro artista al que le costaba crecer bajo la sombra de su esposa y las dificultades de la vida en familia.
Los detalles de la relación se van descubriendo uno a uno, contradiciendo o complementando lo que ya sabíamos o intuíamos con la información pretérita. Este trabajo de orfebrería narrativa es muy valioso y ocurre durante los 150 minutos del metraje.
Es así porque el relato nunca es taxativo, siempre juega con la subjetividad tanto del público como de los personajes. La sombra de la duda constante es uno de los puntos más fuertes de la película. Otra son sus interpretaciones contenidas y fascinantes, tanto entre los actores más experimentados como la del niño y hasta de su perro Snoop.
Todos sabemos que los galardones (en este caso la Palma de Oro en Cannes y las múltiples nominaciones al premio Óscar) no definen la calidad de un filme. Pero se agradecen, porque seguramente estimulará a más de un curioso a acercarse a las salas y producir en su mente una sentencia sobre como fueron los últimos instantes en la malograda vida de Samuel Maleski.
por Fausto Nicolás Balbi
@FaustoNB