Cinco mil espectadores asistieron ayer a la apertura de la 11ma edición del Festival Lumière, posiblemente el principal evento del mundo consagrado al cine clásico restaurado. Este evento, establecido en 2009 por Thierry Frémaux y Bertrand Tavernier, ofrece cada año más de 150 películas restauradas además de un gran número de homenajes.
En declaraciones brindadas al portal Euronews Frémaux expresó que «Cuando nos planteamos la idea de crear un festival en la ciudad natal de la cinematografía, el concepto estaba claro: hacer un festival sobre la historia del cine. Un festival popular pero al mismo tiempo un espacio para demostrar que los artistas son también cinéfilos y les encanta presentar películas de otros».
Uno de los momentos más esperados de esta edición ocurrirá el próximo viernes 18, cuando Francis Ford Coppola reciba el Premio Lumière 2019, principal galardón que entrega el Festival. El homenaje al creador de La conversación incluirá la proyección de 17 de sus largometrajes.
Los invitados de honor de esta edición son: Frances McDormand (se verán filmes como Mississippi en llamas y Fargo), Daniel Auteuil (Caché, Un corazón en invierno), Bong Joon-ho (se verán sus películas además de una selección de filmes coreanos de los años 70, 80 y 90 seleccionados por el autor), Donald Sutherland (M.A.S.H., Casanova de Fellini), Marco Bellocchio (I pugni in tasca, Buongiorno, note), Marina Vlady (Una storia moderna de Marco Ferreri, The Two of Them de Márta Mészáros) y Gael García Bernal.
Otros de los filmes destacados de esta edición son: Balance de un matrimonio joven de Krzysztof Zanussi, Milagro en Milan de Vittorio De Sica, Cinco dedos de Joseph L. Mankiewicz, Pasaron las grullas de Mikhaïl Kalatozov, The Cremator de Juraj Herz, Liberté, la nuit de Philippe Garrel, Toni de Jean Renoir y Un sac de billes de Jacques Doillon, entre decenas de títulos.