Ayer quedaron inauguradas las 37 Jornadas Argentinas e Internacionales de Cine y Video Independiente, UNCIPAR. Cita obligada en Villa Gesell, que este año se desarrollarán desde el 2 al 4 de abril.
En el acto de Apertura, Liliana Amate, quien preside el festival, aseguró que “es una alegría poder estar de nuevo en Villa Gesell, compartiendo estos tres días a puro cine con todo el público. En esta apertura, contar con las presencias de los jurados, significa mucho, porque estas jornadas se hacen entre Uncipar, la Unión de Cine Independiente, la Municipalidad de Villa Gesell, a través de la Secretaría de Cultura y Educación, el Instituto Nacional de Cine, a través de la Coordinación de Festivales Nacionales de la Gerencia de Acción Federal, los realizadores y los sponsors. Ellos son los que hacen posible estas jornadas”.
Los jurados encargados de dirimir los ganadores en la Competencia Nacional son la directora y guionista Alejandra Marino; la actriz Susana Varela; el director y guionista Benjamín Avila; el director Daniel de la Vega y la guionista Enriqueta Berro (jurado por Villa Gesell). En La Competencia Internacional los que deciden son: la directora y guionista María Victoria Menis; el director, guionista y productor Miguel Mato y el productor Hugo Castro Fau.
HOMENAJE A MALVINAS Y COMPETENCIA NACIONAL
Con motivo de conmemorarse el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, en Uncipar se exhibieron tres cortos de Malvinas por los protagonistas, una realización colectiva de Cine en Movimiento con Veteranos de Malvinas, y cinco cortos de los que conforman Malvinas-30 Miradas (CP 4909 de Miguel Mato; Regimiento 7 regresa a casa de Fernando Spiner; Teoría sobre las colonias de Adrián Caetano; Fragmentos de Nicolás Gil Lavedra y Comodoro de Lucía Puenzo). Para presentar este último estuvieron los directores Miguel Mato y Fernando Spiner, en tanto Carlos Sánchez, Quique Miranda, Pepe Valdéz y Emilio Alsina, de la Asociación Cultural Soberanía y Memoria, lo hicieron por Malvinas por los protagonistas.
Las palabras de los ex combatientes fueron el anticipo emotivo para un auditorio que siguió expectante las imágenes posteriores que, en muchos casos, nos dejaron con un nudo en la garganta y nos permitieron la posterior reflexión sobre una herida que aún permanece abierta en la sociedad.
De lo exhibido en las dos tandas de cortos de la Competencia Nacional se destacó:
Responso para un hombre de agallas de José Issa: una historia sobre un hombre con mala suerte, construida con bellas y líricas imágenes, que va pasando del humor, a partir de las penurias del otro, a una comprensión por el protagonista que padece un destino fatal.
El paso de Victoria Mammoliti construye una historia que permite acercarse a la muerte desde un lado original y emotivo, sin recurrir al sentimentalismo.
La piel de Ezequiel Yanco: dos doblajistas y un vínculo donde el grano de la voz se vuelve cuerpo. Destacables encuadres y puesta en escena, con actuaciones precisas y apropiadas. Hay imágenes de sexo explícito que pueden complicar su exhibición y que tampoco son imprescindibles al observar las sutilezas que el director sabe manejar.
Hasta las entrañas de Leandro Cozzi: una historia que combina el terror gore con el suspenso y hasta una mirada social. Un corto de fuertes imágenes, climas opresivos y tensionantes armados con milimetrado montaje y actuaciones destacables y creíbles.
También son mencionables la sequedad y concisión para narrar una historia de explotación sexual en Invisible de Juan Echalecu; las observaciones de dos mundos diferentes y en colisión a partir de la globalización de las redes de internet y los avances tecnológicos que acercan y a la vez alejan en Hasta el dominó siempre de Tian Cartier y la frescura de un grupo de chicas en el duelo por lo que va quedando atrás en Videojuegos de Cecilia Kang.
Por Javier Luzi
@elejavier