Cientos de miles de personas asesinadas, desaparecidas y secuestradas es el saldo que dejaron las dictaduras cívico militares que durante los años 70 y 80 usurparon el poder en Argentina, Bolivia, Paraguay, Uruguay, Brasil y Chile.
Las dictaduras de estos países trabajaron coordinadamente en el seguimiento, vigilancia, detención, tortura, traslados entre países y desaparición o muerte de personas perseguidas por estos estados terroristas.
Ese sangriento capítulo de la historia es el eje de la película Olvidados, dirigida por el mexicano Carlos Bolado que se estrenará por estos días en Bolivia.
Bolado dirigió a un elenco formado por sus compatriotas Damián Alcázar y Claudia Lizaldi; los argentinos Rafael Ferro, Ana Celentano, Tomas Fonzi y Guillermo Pfening; los chilenos Eduardo Paxeco y Manuela Martelli, el portugués Carloto Cotta y los bolivianos Cristian Mercado, Jorge Ortiz y Bernardo Peña, entre otros.
El productor Paolo Agazzi sostuvo que se trata de un filme que ha logrado integrar componentes «éticos y estéticos» con un contexto «muy importante en términos políticos e históricos» y que fue realizado con un nivel técnico y artístico destacable.
Para financiar el filme la productora y actriz Carla Ortiz logró el apoyo del empresario y filántropo canadiense Frank Giustra, fundador de Lions Gate Entertainment, y también accedió a recursos económicos de un fondo estatal boliviano.
Fuentes: Página 7 / EFE